El ángel de la muerte pasando por el contienente americano

Mensaje de Dios para todo su pueblo, entregado por el Espíritu Santo a sus siervos reunidos en oración.
"El Señor no retarda su promesa, según algunos la tienen por tardanza, sino que es paciente para con nosotros, no queriendo que ninguno perezca, sino que todos procedan al arrepentimiento". 2 Pedro 3.9
Rosi Torres

Ungir los dinteles de las puertas
Unjan los dinteles de las puertas, para que el ángel de la muerte no pase por tu casa, para que el ángel de la muerte siga de lado, no solo en Chile, sino que también Paraguay, Argentina, Perú, Ecuador, Puerto Rico.
Unjan sus puertas, porque el ángel de la muerte está pasando por toda la humanidad; hijos míos, alrededor de este mundo: tienen que ungir alrededor de los dinteles de sus puertas porque el ángel de la muerte está pasando de diferentes formas, pero está pasando; unjan a sus hijos, unjan a sus respectivas familias, no nieguen mi nombre, el ángel de la muerte pasa por esta humanidad. Unjan, unjan. Declaren sus propiedades para Cristo, el ángel de la muerte pasa por esta tierra,  por la tierra entera, por este globo terráqueo. Pueblo mío, pueblo mío, pueblo mío, unge tu casa, tus límites.

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Tsunami
¡Gran tsunami se viene, gran tsunami se viene!, desolará esta tierra, porque este cataclismo causará un desorden mundial, tocará  gran parte del continente americano.  Un tsunami que toca a muchos países,  unjan sus casas que viene el mar sobre esta nación (Chile), y sobre este continente, unjan sus casas que viene el mar sobre este continente.  A muchas ciudades se las tragará el mar.
Solo en la sangre de Jesucristo, solo en la sangre de mi Hijo podrán encontrar salvación.

Yo te llamo HOY
Arrepiéntanse ahora, dice el Señor, porque no saben si mañana seguirán vivos, no saben si mañana a la vuelta de la esquina los está esperando la muerte, y por no obedecer al llamado, por no hacer caso al sueño que Yo te di, tengas que ir a la perdición, porque Yo te llamo, Yo te doy oportunidades dice el Señor, pero tu las desprecias. Tú dices: - lo dejo para la próxima semana, lo dejo  para el próximo mes- pero la próxima semana o el próximo mes quizás ya sea muy tarde para ti. Por algo te estoy llamando hoy, hoy, porque Yo veo más allá, ¡Yo veo más allá!, arrepiéntete ahora, si así lo hicieres, cuando mueres vienes conmigo,  morir en Cristo es ganancia, muchos no alcanzan  arrepentirse y se van a una eternidad sin mí.

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Señales en los cielos, ¡despierta pueblo de Dios!
Ay, ay, ay, las señales de los cielos, vienen en aumento, muchos tienen ojos pero no ven, oídos pero no oyen. ¡Despierta, despierta tú que duermes! ¡Despierta, despierta tú que duermes!, que Yo no te agarre dormido, ¡que no te agarre dormido aquel día!, porque si te agarro dormido: partirás para perdición. ¡Despierta, despierta tú que duermes para que no te pierdas!

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Jesús: digno de toda gloria, honra y alabanza
¡Alábalo!, porque dio su sangre preciosa, por amor a ti en el calvario, alábalo día y noche, día y noche, porque Él se merece toda la gloria y toda la honra,
No desprecies la sangre de mi Hijo. No desprecies la sangre de mi Hijo que derramó con tanto dolor y con tanto amor a ti, no desprecies tan hermoso sacrificio, ¡¡fue mi Hijo al que envié, no lo desprecies!! Mi Hijo Jesucristo murió en la cruz del calvario por ti, derramando hasta su última gota de sangre.  Y El me sigue pidiendo por ti. El intercede por ti, y tú no lo quieres.  Tú no le quieres abrir tu corazón.  Más El sigue intercediendo.

Consagración total
¡Déjate de emociones pueblo! Déjate de emociones pueblo  que Yo no soy un dios de emociones.
No quiero migajas, no quiero limosnas de ti, Yo te quiero a ti por completo. ¡Desecha tus ídolos pueblo! Desecha tus ídolos pueblo que con tus ídolos no me sirves, a medias no me sirves, me sirves completo, dispuesto. Deja, ¡deja tus ídolos!, y entrégate, ríndete a mí. Porque mucha es la mies, mas los obreros son pocos.